Derretimiento de los polos

A veces me dispongo escribir. Pasa la primera frase, el primer verso y me quedo seca. La pluma se detienen para no lograr avanzar. 
Sucede que no es intencional, sucede que debo tener el corazón pelado como mango, ensangrentado como un raspón fresco. Hecho añicos cual frágil vasija tonalteca. Y me parece injusto ser una magdalena y que se me pueda diagnosticar depresión, ansiedad y trastorno bipolar basado en mis relatos y pensamientos aleatorios que por alguna razón considero suficientemente dignos de plasmar. A menudo empleo cualquier otro adjetivo en lugar de la palabra “feliz” y tal vez en esto radique mi acaecimiento o tal vez sólo se deba al derretimiento de los polos. 

Comentarios

Entradas populares