La Bohème


Evidentemente es el elixir ámbar el gerente operativo del impulso literario de esta noche.

El lugar también invita a escribir, la locación: el Conjunto Santander de Artes Escénicas.

A pesar de la polución que atormenta los cielos y el aire, hace una noche maravillosa.

Escucho grillos y las frustradas estrellas también murmuran.

Frente a mí una ola de sillas rojas, tras las puertas se interpreta La Bohéme de Giacomo Puccini. 

Todo suena tan refinado, incluso yo bebo algo de autoría austriaca !oh lala! con esto y todo, mis Vans y mis axilas sudadas me devuelven a la triste miseria de la clase media baja.

Me senté en el trono a la diestra de la entrada, un trono/escultura/bufón con zapatillas y boca de trompeta.

Hace una noche maravillosa y yo realmente no podría pedir más.

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